¿Gracia o verdad ... o ambas?
La verdad sin la gracia cultiva la justicia propia y un legalismo aplastante. La gracia sin la verdad cultiva el engaño y las concesiones morales. ¿Es posible abrazarlas ambas con equilibrio? Jesus lo hizo.
Randy Alcorn ofrece una lista sencilla pero profunda con dos puntos, destinada a comprobar nuestra semejanza a Cristo. Al final, afirma, no necesitamos escoger entre gracia y verdad. Las necesitamos ambas. Y para que la gente vea a Jesus en nosotros, las debe ver ambas.